Preguntas frecuentes

¡Claro que sí! Puedes tomar nuestros productos junto con otros suplementos alimenticios sin ningún problema.

Recomendamos tomar los probióticos en ayunas para minimizar la influencia de las enzimas digestivas y las sales biliares. Sin embargo, tú conoces tu cuerpo mejor que nadie: si te resulta más cómodo tomar las cápsulas después o durante una comida, no hay problema. ¡Lo importante es que encuentres el momento que mejor funcione para ti!

No recomendamos guardarlas en tu pastillero, ya que los cultivos bacterianos son sensibles a la luz. Nuestro tarro de vidrio ha sido desarrollado para proteger las cápsulas, por lo que es mejor mantenerlas ahí.

No pasa nada si te saltas un día o dos. Sin embargo, para obtener resultados óptimos, se recomienda tomarlos a diario. Esto se debe a que nuestros probióticos son microbios transitorios que viajan por tu intestino grueso, donde se encuentra la mayor parte de tu microbioma. Por eso, es importante una ingesta continua para mantener su efecto.

La respuesta corta es: ¡No! No es necesario. Esta es una pregunta que nos hacen con frecuencia, ya que muchos probióticos se venden en la sección refrigerada de las tiendas. Sin embargo, a diferencia de los alimentos perecederos, la refrigeración no les garantiza frescura a nuestros productos. De hecho, si un probiótico no sobrevive a temperatura ambiente fuera del frigorífico, podría indicar una mala estabilidad del producto, un bajo número de organismos viables o una formulación insuficiente. Nuestras cepas probióticas son estables a temperatura ambiente (hasta 25 °C). Si en tu casa las temperaturas son constantemente más altas, te recomendamos refrigerar el producto en un recipiente hermético para protegerlo de la humedad.

Hay varios factores que pueden influir en la elaboración de nuestros productos, por lo que el color de las cápsulas puede variar de un lote a otro. Lo mismo ocurre con el polvo, que también se produce y se envasa en lotes. ¡Pero no te preocupes! Estas diferencias son completamente normales y no afectan en absoluto la calidad del producto.

Nuestros productos están diseñados de tal forma que puedes combinar las Dailybacs, las Dietbacs y los suplementos entre sí sin ningún problema. Así que puedes tomar Dietbacs y Dailybacs juntas. De hecho, ¡el efecto sobre tu salud es aún mayor!

Se indica la fecha de caducidad de las cápsulas en los envases. Por lo general, cuando recibes tus cápsulas, tienen una caducidad de 18 meses. Aunque tomar bacterias "caducadas" no representa ningún peligro, es importante tener en cuenta que los probióticos pierden su "potencia" con el tiempo, lo que significa que su efecto positivo podría no ser tan fuerte. Puedes encontrar la fecha de caducidad de tu envase en la parte posterior de la etiqueta. Si ya has abierto el envase, es fundamental proteger las cápsulas de la humedad, ya que ésta puede afectar la efectividad de las bacterias. Para evitarlo, te recomendamos que no dejes el envase abierto. Lo ideal es que solo lo abras cuando vayas a tomar una cápsula y luego deposites las restantes en tu tarro de vidrio, que precisamente está diseñado para ofrecer una protección óptima frente a la luz y la humedad. En resumen, es seguro tomar los productos después de la fecha de caducidad. Sin embargo, si tu producto ha caducado, no dudes en avisarnos y te lo sustituiremos sin coste alguno.