Aprovechemos el poder de las bacterias
Una flora intestinal equilibrada es clave para el bienestar integral. Esto no solo beneficia la salud intestinal, sino que también tiene un impacto positivo en el corazón, la mente, las alergias, el metabolismo y el sistema inmunológico.
Gran parte de lo que hacemos influye en nuestra salud digestiva: qué y cuándo comemos, nuestra ingesta de líquidos, la cantidad de fibra que consumimos, cómo respondemos al estrés y la ansiedad, la calidad y duración de nuestro sueño, la cantidad de ejercicio que hacemos, y nuestro consumo de cafeína y alcohol. Además, otros factores de la vida moderna también pueden afectar el microbioma intestinal, como el uso de antibióticos y analgésicos de venta libre, como la aspirina y el ibuprofeno.
Flora intestinal
(o microbioma)
Cuando piensas en los órganos de nuestro cuerpo, seguramente te vienen a la mente el corazón, los riñones o el hígado. ¿Pero alguna vez has pensado en el microbioma? ¿De verdad es un órgano? Pues sí, algunos científicos incluso lo llaman el "superórgano" o un superorganismo. El microbioma humano está compuesto por unos 40 billones de microorganismos, que se encuentran principalmente en el tracto gastrointestinal.
La combinación de prebióticos y probióticos
Estudios independientes y controlados demuestran que la colonización selectiva del intestino es más efectiva con un simbiótico, una combinación de prebióticos y probióticos. Esta mezcla ayuda a que los cultivos se integren de manera más exitosa en el microbioma.